Desde que confirman su estado, su único propósito es cuidar la salud de su bebé. Y, con toda razón, tener un hijo les permite conocer el amor verdadero.
Además de los cambios físicos y mentales, las mujeres embarazadas deben modificar sus hábitos no solo para garantizar el bienestar de su hijo sino también el de ellas mismas.
De acuerdo con los expertos de Salud180, estos cambios no significan que exista un peligro extremo sino que funcionan como una medida preventiva.
1. No ingiera alimentos crudos o que han sido expuestos a bacterias
¿Por qué? El portal explica que este tipo de alimentos favorecen que cualquier mujer embarazada desarrolle infecciones, lo que podría afectar al niño. Algunos de esos productos son:
-Quesos no pasteurizados.
-Jugo de frutas no pasteurizados.
-Huevos crudos.
-Pescado, carne, mariscos, patés o comidas no procesadas.
2. Ingerir bebidas alcohólicas
Llámese vino, cerveza, whisky o de cualquier tipo. Se recomienda evitar por completo la ingesta de estas bebidas. El consumo de estas bebidas aumenta las posibilidades de que el bebé desarrolle síndrome alcohólico fetal.
3. Tomar café o bebidas que contienen cafeína
Las investigaciones demuestran que ingerir más de una taza y media al día favorece las contracciones e incrementa el riesgo de padecer un aborto.
Si eres amante del café, la recomendación es dejarlo de forma gradual o probar las opciones descafeinadas. Recuerda que este “ingrediente” lo encuentras en el té negro o verde y refrescos gaseosos entre otros.
4. Prohibido remover escrementos de gato
¿Cómo? Durante el embarazo está totalmente prohibido tener contacto con heces de este animal. Si lo haces, corres el riesgo de adquirir una infección llamada tozoplasmosis. Algunas de las consecuencias de esta enfermedad son: parto prematuro, problemas con el crecimiento normal del feto y lesiones cerebrales y en la vista del pequeño.
Algunas abuelitas de antes afirmaban que tener un gato en casa impedía que las mujeres quedaran embarazadas. ¿Te arriesgarías?
5. No consumas edulcorantes artificiales
Lo más conveniente es reducir la ingesta de edulcorantes como aspartamo, sucralosa y acesulfamo K durante los 9 meses de gestación.
6. ¡Cuidado con el impacto de tus ejercicios!
Ya sabes que los ejercicios son ideales para tener un embarazo peo, sobre todo, un parto exitoso. Pero aquellos de alto impacto no tienen que estar en tu rutina. Algunas de esas actividades físicas son:
-Sentadillas.
-Levantar pesas.
-Abdominales.
-Deportes de contacto como fútbol, voleibol o baloncesto.
7. Baños calientes
Si serás madre pronto, limita actividades como la sauna o un jacuzzi caliente. Aunque relejan, estos hábitos provocan problemas en el bebé. Evita bañarte con agua muy caliente y exponerte al sol.
8. Masticar chicle
Durante el embarazo, algunas mujeres como tú suelen consultarle a su ginecólogo sobre su sensibilidad dental. Uno de los errores que promueven ese malestar es masticar chicle. Además de dañar tus dientes, dan lugar a amalgamas.
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