Recetas de comidas faciles para adelgazar

***Macarrones con gambas***

Si buscas una receta completa, equilibrada y rica que te sirva de plato único y no tenga mucha dificultad, atrévete con nuestros macarrones con gambas

INGREDIENTES:


  • 240 g de macarrones
  • 300 g de colas peladas de gamba
  • 1 chile fresco
  • 3 ajos
  • 2 limas
  • Albahaca
  • Aceite de oliva
  • Sal

¿Por qué renunciar a un plato de macarrones de vez en cuando? Si no te pasas de la raya con las cantidades de pasta y la acompañas con alimentos bajos en calorías, como las colas de gambas, tienes una receta muy completa, equilibrada y riquísima que te sirve de plato único y no tiene por qué engordar.

CÓMO PREPARARLO PASO A PASO


  • Cocer la pasta. Hiérvela en abundante agua caliente y, cuando esté al dente, escúrrela.
  • Lavar y reservar. Lava y seca las colas de gamba. Lava la albahaca, guarda unas hojas para decorar y pica las otras. Limpia el chile y córtalo en rodajitas finas. Pela y pica los ajos. Y lava las limas.
  • Saltear y sofreír. Corta las limas en cuartos y saltéalos en 4 cucharadas de aceite un par de minutos. Incorpora el chile, el ajo y la albahaca y sofríe removiendo 1 minuto. Agrega las gambas y saltéalas durante un par de minutos.
  • Retirar y emplatar. Retira del fuego, extrae los cuartos de lima y escurre un poco de su jugo en el conjunto; rectificando de sal si es necesario. Mezcla esta preparación con la pasta y sirve el plato decorado con las hojitas de albahaca que habías reservado en el paso 2.


UN TOQUE MUY REFRESCANTE

Si te gusta la lima, puedes intensificar aún más su aroma rallando un poco de su piel y espolvoreándola por encima del plato de pasta justo antes de llevarla a la mesa. Le dará un toque muy refrescante.

COMER PASTA Y ADELGAZAR ES POSIBLE

Aunque es cierto que la pasta es muy calórica, no tenemos por qué renunciar a ella si tomamos ciertas precauciones. No pasar de los 60 g por persona. Comerla al mediodía para dar tiempo a quemar sus calorías. Optar por pasta integral que es más saciante y facilita el tránsito intestinal. Y, sobre todo, ir con cuidado con las salsas, ya que pueden ser tanto o más calóricas que la propia pasta. Para dar sabor, basta con agregar especias o ajo, o combinar el plato con setas, verduritas o proteínas magras.

¿SABÍAS QUE EL CHILE ES QUEMAGRASA?

Pues sí. El chile da sabor a la pasta y, al mismo tiempo, te ayuda a adelgazar porque contiene capsaicina, una sustancia que sube la temperatura corporal, aumenta
el metabolismo y transforma la grasa blanca en parda

***Pollo asado con cebollas***

Si quieres un plato de fiesta sabroso, económico y ligero, prueba nuestro pollo asado con cebollas. ¡Para chuparse los dedos!

INGREDIENTES:


  • 1 pollo mediano
  • 12 cebollas pequeñas
  • 1 vaso de vino blanco
  • 1 tacita de caldo
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cucharada de mantequilla
  • 1 cucharada de perejil picado
  • 1 rama de canela
  • Pimienta
  • Sal

Siempre que deseches la piel, el pollo es una de las carnes menos grasientas que puedes encontrar en el mercado. Y resulta delicioso si, como en nuestro pollo asado con cebollas, lo elaboras al horno junto con verduras y especias.

Así no requiere tanta grasa como cuando lo cocinas al fuego y, en cambio, queda mucho más jugoso. Un plato sofisticado pero ligero, que te dejará satisfecha y que queda de maravilla como plato de fiesta.

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO


  • Preparar el pollo. Precalienta el horno a 230º. Mientras tanto, lava el pollo, retira las posibles plumas que pudieran quedar y sécalo bien con papel de cocina. Salpimiéntalo, úntalo con aceite y colócalo en una fuente refractaria. Luego, esparce unos copitos de mantequilla por el fondo de la fuente y mete en el horno.
  • Asar el pollo. Ásalo durante 30 minutos más o menos. Después, baja la temperatura del horno a 200º, riégalo con el vino y prosigue la cocción aproximadamente unos 15 minutos más.
  • Pelar las cebollas y lavarlas. Después, agrégalas a la fuente, junto con el caldo, la rama de canela y el perejil picado. Y prosigue la cocción unos 25 minutos más.
  • Retirar y montar el plato. Saca la fuente del horno, cúbrela con papel sulfurizado y deja reposar el asado durante 5 minutos para que los jugos se repartan bien. Después, pasa el pollo y las cebollas a una fuente de servir.

IMPROVISA UNA SALSA

Lo más sencillo es aprovechar los jugos de cocción añadiendo dos o tres cucharadas de agua caliente a la fuente donde has asado el pollo y raspando el fondo suavemente con una espátula. Luego, pasa la salsa obtenida a un cacito y llévala a ebullición. Sírvela bien caliente en una salsera, acompañando al pollo y las cebollas.

CÓMO QUITARLE EL EXCESO DE GRASA

Para restarle calorías, puedes retirarle la piel al pollo, prescindir de la mantequilla sustituyéndola por aceite de oliva, y no aprovechar los jugos de cocción para hacer la salsa, ya que allí es donde se concentran todas las grasas que habrá ido soltando el pollo.

***Rollitos de lubina con pisto***

Si buscas un plato de fiesta sencillo, pero elegante y sofisticado al mismo tiempo, este es el tuyo.


INGREDIENTES:

PARA EL PLATO


  • 4 lubinas en filetes
  • 1 pimiento verde
  • ½ pimiento rojo
  • 2 tomates
  • 1 berenjena
  • 1 calabacín
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 ramita de tomillo
  • Aceite de oliva
  • Pimienta
  • Sal

PARA LA SALSA


  • 200 ml de caldo de pescado
  • 125 ml de nata
  • 150 ml de cava
  • 2 puerros
  • Aceite de oliva
  • Pimienta
  • Sal

Si no quieres calentarte mucho la cabeza buscando un plato de fiesta que sea sencillo, pero elegante y sofisticado al mismo tiempo, prueba con los rollitos de lubina rellenos de pisto con salsa de puerros al cava.

Es la típica receta súper fácil de pescado con verduritas, pero en versión "alfombra roja" gracias a la suma de tres elementos. La protagonista: la lubina, que es una de las estrellas más deseadas de los pescados. La presentación: en forma de coquetos y tentadores rollitos rellenos. Y un acompañante de lujo: una irresistible salsa de puerros al cava que sabe tan bien como suena.

¡Exquisita combinación!

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO


  • Preparar las hortalizas. Lava las verduras. Por un lado, pela y pica la cebolla y los ajos. Y por otro, limpia los pimientos, el calabacín y la berenjena, y córtalos todos en daditos pequeños.
  • Cocinar el pisto. En primer lugar, sofríe la cebolla durante unos 2 minutos en 3 cucharadas de aceite. Luego, agrega el ajo, los pimientos, la berenjena y el calabacín, y sofríe el conjunto alrededor de 15 minutos. Por último, añade los tomates rallados y el tomillo, tapa y cuece 20 minutos aproximadamente.
  • Elaborar la salsa. Mientras se hace el pisto, puedes ir preparando la salsa. Primero lava y pica los puerros y rehógalos unos 5 minutos en un hilo de aceite. Luego, añade el cava y deja evaporar. Cubre con el caldo de pescado y deja cocer hasta que reduzca a la mitad. Finalmente, añade la nata, cocina alrededor de 2 minutos más, tritura la salsa, pásala por el chino, salpimienta y reserva.
  • Hornear y servir. Precalienta el horno a 200º. Sobre una bandeja de horno, enrolla los filetes de lubina como si fueran un aro, y rellénalos con el pisto. Solo te falta hornear durante 8 minutos aproximadamente, y servir un par de rollitos por comensal acompañados con la salsa de puerros al cava.

EVITA QUE SE DESMONTEN

Para que los filetes aguanten enrollados y no se te desmoronen, lo más indicado es atarlos con cordel de cocina o sujetar el punto donde se une el rollito con ayuda de un palillo, que puedes retirar una vez emplatado.

***Huevo poché con judías verdes***

Porque no podemos tomar el calcio siempre de la misma manera, esta sencilla receta te aporta algunos nutrientes que ayudan a la salud de tus huesos.


INGREDIENTES:


  • 4 huevos
  • 50 g de judías verdes
  • 2 zanahorias
  • 1 berenjena
  • 1 calabacín
  • 1 cebolla morada
  • ½ pimiento rojo
  • 4 espárragos
  • 1 guindilla
  • 1 lima
  • 5 cucharadas de salsa de soja
  • 2 cucharadas de vinagre
  • Aceite de oliva

Tanto si te cuesta comer verduras y hortalizas como si quieres innovar para no tomarlas siempre igual, esta receta se convertirá en tu nueva opción favorita. Prepararla es tan fácil que no te lo creerás. Solo te llevará 30 minutos y te aporta únicamente 156 calorías por lo que es ideal si buscas un plato ligero. ¿Tienes unos minutos? ¡Empezamos!

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO


  • Limpia, lava y corta en juliana todas las verduras. Calienta 3 cucharadas de aceite en una sartén honda y saltea las verduras durante 5 minutos.
  • Lava y ralla la piel de la lima y resérvala. Corta esta fruta en dos y exprímela. Mezcla el zumo con la salsa de soja y añádelo a las verduras.
  • Lleva a ebullición un cazo con agua y el vinagre. Casca delicadamente en este recipiente un huevo. Deja que hierva durante 3 minutos envolviendo la yema con la clara según vaya cuajando. Retira con una espumadera y reserva. Repite esta operación con los otros 3 huevos.
  • Reparte las verduras y los huevos en cada plato. Pica la guindilla y mézclala con el aceite y la ralladura de lima. Espolvorear por encima de cada plato y disfruta de este ligerísimo y saludable plato.


UN HUEVO POCHÉ PERFECTO

Antes de echar el huevo, crea una corriente circular dentro del cazo y deslízalo en el centro. Parece complicado pero verás que una vez hagas el primero, el resto te resultará facilísimo.

***Macarrones al pesto***

Una opción nutritiva y muy equilibrada a base de pasta, gambas y brócoli, que no tiene por qué ser muy pesada si se aligera la salsa con queso light.


INGREDIENTES:


  • 240 g de macarrones
  • 12 nueces
  • 400 g de gambas
  • 1 ajo
  • Albahaca
  • 1 brócoli pequeño
  • 2 cucharadas de queso rallado light
  • 1 chorrito de vermú blanco seco
  • Aceite de oliva
  • Sal
  • Pimienta

Uno de los motivos por los que un plato de pasta puede engordar no es la pasta en sí, sino la salsa que la acompaña, que puede ser tanto o más calórica.

En este sentido, la salsa pesto puede ser una de esas bombas calóricas a no ser que la prepares como en esta receta que te proponemos. El secreto para aligerarla es sustituir el clásico queso parmesano por queso light y los piñones por nueces. Y por supuesto, no pasarse con la cantidad de pasta. Unos 60 g por persona.

Así te queda un plato mucho más ligero, sin dejar de ser muy nutritivo al mismo tiempo gracias a la pasta y las gambas. Y por lo tanto, una muy buena opción si buscas una receta equilibrada que te sirva como plato único con todos los nutrientes necesarios: hidratos, proteínas y fibra, junto con las vitaminas y minerales que contienen sus ingredientes.

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO


  • Cocer el brócoli. Lávalo, sepáralo en ramitos y retira el tronco. Cuécelo en agua salada durante unos 10 minutos y escúrrelo.
  • Preparar el pesto. Lava la albahaca. Pela el ajo y las nueces. Pica finos los tres y disponlos en el vaso de la batidora. Incorpora 4 cucharadas de aceite y el queso, salpimienta y tritura hasta obtener una salsa fina y homogénea.
  • Saltear las gambas. Quítales la cáscara, salpimiéntalas y saltéalas durante unos 3 minutos en una sartén con 2 cucharadas de aceite caliente. Luego, vierte el vermú y prosigue la cocción 2 minutos hasta que se evapore el alcohol por completo. Finalmente, retíralas del fuego.
  • Cocer la pasta. Introduce los macarrones en abundante agua hirviendo y cuécelos según el tiempo que se indique en el envase. Escúrrelos y mézclalos con el brócoli y las gambas.
  • Emplatar y servir. Para terminar el plato, añade el pesto que has realizado anteriormente, remueve y sirve enseguida.


EL BRÓCOLI, AL DENTE TAMBIÉN

Para evitar que el brócoli quede muy blando y se deshaga al mezclarlo, puedes cocerlo al vapor. Y sobre todo, no deseches el tallo porque tiene tantos nutrientes como el resto del brócoli y está riquísimo, tanto cocido... como crudo.

Sí, sí, crudo también. Lo único que tienes que hacer es pelarlo, ya que en la parte externa es donde se concentran todas las hebras de fibra que lo hacen difícil de masticar cuando está crudo. En algunas culturas, este tallo se considera un manjar y, como solo hay uno, lo pelan y lo cortan en bastoncitos que se reservan para deleitar a los más pequeños de la casa.

BRÓCOLI, UN SÚPER ALIMENTO

El brócoli, además, se considera un súper alimento. Aparte de sus vitaminas y minerales, se le reconocen propiedades anticancerígenas gracias a su contenido en sulforafano. Precisamente por eso es más recomendable comerlo crudo o al vapor, ya que al cocerlo se reducen considerablemente los niveles de esta beneficiosa sustancia.

***Carpaccio de ternera***

Un aporte extra de proteínas que se prepara en un pispás.

INGREDIENTES:

  • 500 g de tapa de ternera en un trozo
  • 1 limón
  • 50 g de queso parmesano
  • 30 g de rúcula
  • 4 tomates secos
  • 4 cucharadas de aceite de oliva
  • Pimienta
  • Sal

Si buscas una receta fácil y muy nutritiva, prueba el carpaccio de ternera. Es ideal para lograr un aporte extra de hierro cuando tienes anemia, por ejemplo.

Y si lo acompañas con una simple ensalada, con los mismos ingredientes que los del acompañamiento de tomatitos secos y rúcula que te proponemos para decorar el plato –por dar una idea–, tienes preparada una comida ligera y completa sin ni siquiera tener que tocar el fogón.

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO

  • Pasos previos. Por un lado, corta el queso en escamas. Por otro, deja los tomates en remojo con agua para que se hidraten durante 1 hora más o menos. Y pasado este tiempo, escúrrelos y córtalos en tiras finas.
  • Hacer el carpaccio. Mientras se están hidratando los tomates, envuelve el trozo de carne en film de cocina e introdúcelo en el congelador durante alrededor de 30 minutos, para que se endurezca ligeramente. Una vez enfriada la carne, retírala del congelador y córtala en filetes lo más finos posible con ayuda de un cuchillo afilado. Y por último, ve disponiendo las láminas resultantes en una fuente.
  • Montar el plato. Por un lado, lava la rúcula. Y por otro, bate el aceite con el zumo de limón, una pizca de sal y otra de pimienta. Para servirla, solo te queda condimentar la carne con esta salsa y decorarla con las escamas de parmesano, las tiras de tomate seco y los brotes de rúcula. Un acompañamiento que puedes convertir en una ensalada aumentando la cantidad de rúcula y tomates.


BUENA IDEA PARA UNA SALSA

Otra posible salsa que le sienta de maravilla al carpaccio consiste en mezclar 80 g de mayonesa light con 40 g de mostaza y unas gotas de salsa Worcester. Lo mezclas todo bien hasta que tenga la consistencia de una salsa homogénea y ¡listo!

PARA AHORRAR TIEMPO

Si tienes prisa, recuerda que puedes echar mano del carpaccio de ternera ya cortado en finas capas y listo para servir que venden en la mayoría de establecimientos. Y sustituir los tomatitos secos por tomates en aceite, que ya están hidratados, o tomatitos cherry, que son mucho menos calóricos.

***Huevo poché con aguacate y langostinos***

Un plato fácil, exquisito, vistoso y muy nutritivo para una ocasión especial o para triunfar un día de fiesta sin perjudicar tu bolsillo


INGREDIENTES:

  • 4 huevos
  • 100 g de rúcula
  • 2 aguacates
  • 2 limas
  • 12 langostinos cocidos
  • Sal y pimienta
  • 4 cucharadas de aceite de oliva

Si buscas un plato fácil, nutritivo, resultón y económico, el huevo poché con aguacate y langostinos es tu plato ideal. No solo tiene el triple poder nutritivo del huevo, el langostino y el aguacate –ricos en proteínas y vitaminas– sino que, además, resulta muy vistoso para una comida o una cena de fiesta y por muy poco dinero si compras los langostinos ya cocidos.

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO

PARA EL HUEVO POCHÉ:


  • Pon a hervir una cazuela con agua para hacer los huevos.
  • Corta cuatro cuadrados de papel film de 25 x 25 cm.
  • Forra con un trozo de film el interior de un bol pequeño, dejando que cuelgue el papel sobrante por los lados. Vierte una cucharadita de aceite de oliva.
  • Casca un huevo en el bol. Une los cuatro extremos del papel y cierra retorciendo hasta envolver el huevo en un paquetito. Ata con un hilo de cocina.
  • Envuelve los cuatro huevos del mismo modo.
  • Cuando el agua arranque a hervir, baja el fuego y pon los huevos a cocer entre 3 y 4 minutos.
  • Sácalos del agua caliente con cuidado y coloca sobre un plato. Quita el hilo y retira el papel film. Reserva.

PARA LA GUARNICIÓN:


  • Lava y seca la rúcula. Reserva.
  • Pela los langostinos y reserva.
  • Lava, seca y ralla la piel de las limas. Luego, exprímelas.
  • Pela los aguacates y corta en rodajas finas. Riégalas con el zumo de lima.

PARA LA PRESENTACIÓN:

Haz una cuna de rúcula. Reparte las láminas de aguacate por encima, primero; luego, los langostinos pelados, y finalmente el huevo. Para rematarlo, salpimienta y espolvorea la ralladura de lima por encima.

UN PLUS DE SABOR

El huevo poché es lo más parecido a un huevo frito sin necesidad de freirlo en abundante aceite. Si quieres darle un plus de sabor, aderézalo con un poco de sal ahumada, hierbas provenzales o cualquier aderezo que te apetezca antes de cocerlo, cuando lo casques en el bol donde has puesto el film transparente. Si lo vas a comer solo, queda de rechupete con un poco de parmesano rallado, por ejemplo.

SABÍAS QUÉ…
El huevo es una semilla de vida, rica en nutrientes esenciales. Si se toma con moderación proporciona más beneficios que perjuicios. Un huevo solo aporta entre 90 y 100 kcal, según su tamaño, así que no engorda mucho. En cuanto a las grasas que contiene, casi la mitad son monoinsaturadas, las más beneficiosas. Además, es rico en hierro y proteínas de primera calidad.

***Ensalada de judías***

La combinación de alubias blancas y judías verdes en ensalada es una receta muy refrescante para cuando buscas un plato equilibrado, saciante y nada pesado


INGREDIENTES:

  • 1 bote de alubias blancas cocidas
  • 100 g de judías verdes redondas
  • 1 bote pequeno de pimientos del piquillo
  • 4 pepinillos en vinagre
  • 1 cebolla morada
  • Alcaparras
  • Vinagre
  • Aceite de oliva
  • Sal

Una de las máximas de una alimentación equilibrada es comer entre dos y tres raciones de legumbres por semana porque nos aportan proteínas de alta calidad sin abusar de las de la carne y el pescado. Pero, en determinadas épocas del año, como por ejemplo en verano, no apetecen demasiado las típicas legumbres guisadas de toda la vida.

¿La solución? Tomarlas en ensalada como en esta receta que combina judías blancas y verdes. No resultan nada pesadas y gracias a la fibra de los ingredientes vegetales y el poder de la pimienta y el vinagre, es un plato muy saciante y con efecto quemagrasa.

CÓMO REALIZARLO PASO A PASO


  • Preparar las judías. Por un lado, saca las alubias blancas del bote, mételas en un colador, pásalas por el chorro de agua fría limpia y déjalas escurrir. Y por otro lado, cuece las judías verdes redondas y, cuando estén al dente, escúrrelas también y reserva ambas.
  • Cortar el resto de ingredientes. Escurre los pimientos y córtalos en tiras finas. Pela la cebolla y córtala en medias lunas. Y corta también los pepinillos en vinagre en trozos gruesos.
  • Saltear y servir. Coge una sartén y calienta un poco de aceite. Saltea en él las alubias y las judías verdes durante unos minutos. Añade la cebolla, los pimientos del piquillo, los pepinillos y un puñado de alcaparras. Mézclalo y aliña con el aceite de oliva, el vinagre y una pizca de sal. Y finalmente, sirve la ensalada estando aún templada.

UN PAR DE SECRETOS PARA IR MÁS RÁPIDO

Para ganar tiempo, también puedes optar por judías verdes ya cocidas y así te ahorras el tiempo de la cocción. Otra posibilidad es prepararla con antelación y comerla fría. Es una opción muy refrescante y solo tienes que sacarla del frigorífico. Si te decides por esta última, ya sea para comerla en casa o para llevártela en una fiambrera, no la aliñes con la sal, el vinagre y el aceite hasta el momento de servir. Así no se reblandecerá en exceso.

LA CLAVE QUEMAGRASA

El punto clave esta receta para quemar grasas es la pimienta y el vinagre. La primera ayuda a acelerar el metabolismo y, por lo tanto, quemas más calorías. Y el segundo, previene el exceso de grasa.

Un estudio japonés publicado en el Journal of Agricultural and Food Chemistry mostró cómo el ácido acético del vinagre podría prevenir el exceso de grasa corporal al favorecer la oxidación de los ácidos grasos en el hígado.

***Salmón con verduritas***

Un plato ligero, equilibrado, sabroso y que se hace en un suspiro. ¿Se puede pedir más?

INGREDIENTES:

  • 4 lomos de salmón limpios
  • 1 bolsa grande de verduras frescas ya cortadas
  • 100 g de yogur natural
  • 1 limón
  • Eneldo
  • Pimienta
  • Sal
  • Aceite de oliva

El salmón con verduras es uno de los reyes de casi todas las dietas. Lleva el sanísimo omega 3 del salmón; la fibra, las vitaminas y los minerales de las verduritas; y, encima, no es un plato excesivamente calórico.

Y si a todo esto le añadimos que está rico, que no requiere ninguna habilidad en los fogones y que se hace en un suspiro, no es extraño que tenga una legión de fans.

CÓMO PREPARAR EL SALMÓN CON VERDURAS PASO A PASO

  • Elaborar la salsa. En primer lugar, pica el eneldo. Luego, exprime la mitad del limón. Y, finalmente, los mezclas ambos con el yogur y un toque de sal y pimienta.
  • Saltear las verduras. Vierte en una sartén 2 cucharadas de aceite. Y cuando ya esté caliente, añade las verduras lavadas y cortadas. Saltéalas a fuego vivo, pero no muy fuerte para que no se quemen. Cuando estén hechas, pero aún al dente, retíralas del fuego, salpimiéntalas, y resérvalas para montar el plato.
  • Dorar el salmón. En una plancha engrasada con un poco de aceite, dora los lomos de salmón por ambos lados. Luego, retíralos y colócalos en una fuente refractaria. Y ásalos un par de minutos en el microondas para que se acaben de hacer por dentro.
  • Emplatar y servir. Una vez asados los lomos, solo tienes que poner uno en cada plato, acompañado por las verduritas salteadas y con un par de cucharadas de la salsa de yogur y eneldo.


VERDURAS CORTADAS, LISTAS PARA SALTEAR

Las bolsas de verduras frescas, lavadas y cortadas, salen más caras que si las compramos a peso y las lavamos y cortamos nosotras mismas. Pero son una solución ideal si tenemos prisa y no queremos tirar de verduras congeladas, que nos pueden llevar más tiempo porque hay que descongelarlas dentro de la nevera…

MÁS AROMA Y SABOR

Para darle un toque más vistoso y potenciar el sabor del plato, también puedes espolvorear un poco de ralladura de piel de limón por encima justo antes de servir.

***Hummus de garbanzos súper ligero***

De primero, como cena ligera o para un picoteo suculento… Este sencillo plato te resuelve varios problemas de un plumazo. ¡Descúbrelo!

Aunque no lo creas, llevas comiendo hummus más tiempo del que imaginas. ¿Te acuerdas de cuando eras pequeña y tu madre aplastaba los garbanzos del cocido con un tenedor? Pues por ahí van los tiros. El hummus no es más que un puré de garbanzos con algo de magia que lo convierte en un plato sencillo, fácil de hacer y muy sano. Y gracias a nuestra receta, de lo más ligero.

El plato tradicional se hace con garbanzos, tahini, aceite de oliva, ajo y especias. Nuestra versión es más ligera porque la cantidad de tahini se reduce mucho y hemos cambiado el aceite de oliva por un yogur griego. Toma nota ¡y cuéntanos qué te parece!

INGREDIENTES:

  • 1 cucharada de tahini (crema de sésamo)
  • 1 bote de 400 g de garbanzos cocidos
  • Yogur griego
  • Medio limón
  • 1 diente de ajo
  • Comino molido
  • Pimentón dulce o picante
  • Aceitunas negras

CÓMO PREPARAR

PASO A PASO: BATIR

Abre el bote de garbanzos y enjuágalos bien bajo el grifo para quitar la sal del líquido conservante. Después, ponlos en un vaso de batidora o similar. Añade un diente de ajo pelado y el zumo de medio limón para potenciar el sabor. Bate hasta que quede homogéneo y espeso. Llega el momento de darle al hummus ese sabor tan característico con el tahini y el comino molido. Sigue batiendo hasta que los ingredientes estén bien integrados.

PASO A PASO: SERVIR Y DISFRUTAR

Vierte el puré de garbanzos en un plato y decóralo con un hilo de aceite (opcional) y las aceitunas. Puedes darle color con un poco de pimentón dulce o picante. Recuerda que el picante tiene un ligero efecto termogénico que te ayuda a reducir la grasa de tu cuerpo. Si quieres saber más sobre las especias quemagrasa, mírate este post.

LA COMPAÑÍA: PAN DE PITA

El pan de pita es el mejor compañero de viaje del hummus, pero si estás a dieta puedes cambiarlo por bastoncitos de zanahoria, pepino o pimiento rojo. O también por "barquitas" de lechuga. Si te apetece otra compañía, dado que el plato en sí es muy ligero, puedes comerlo con unos nachos, ¿por qué no?

TIMBAL DE BERENJENA Y HUMMUS
Otra idea: si te apetece darle al hummus un estilo muy diferente, prueba a preparar un timbal de berenjenas y garbanzos.

¿POR QUÉ ES TAN BUENO COMER HUMMUS?

Es un plato que resuelve varios problemas a la vez:


  • Plato rápido. Coger un recipiente, añadir los ingredientes, triturar y servir.
  • Plato socorrido. ¿Sin nada en la nevera? Tranquila, mira en tu despensa y seguro que aparece un bote de garbanzos cocidos. Tener tahini no es tan habitual… pero también puedes moler tú misma el sésamo.
  • Muy sano. Si algo cuesta es comer las 3 raciones de legumbres semanales recomendadas. Cuando me esfuerzo mucho, mucho me salen dos… y creo que no soy la única. El hummus soluciona este problema. ¡Alehop! Ración de legumbres en plan cena familiar de picoteo.
  • Cocina para todos. Los niños se lo pasan pipa mojando los nachos en el hummus. Las personas con estómago delicado toleran muy bien esta receta (y aún mejor sin el ajo). Es un plato vegetariano, sin gluten y apto para intolerantes a la lactosa si usas un yogur sin lactosa en lugar del griego. ¿Quién da más?
  • Y tus huesos… Van a hacer la ola gracias a la dosis extra de calcio que recibirán de la mano de los garbanzos, el yogur y el sésamo.

¿SABÍAS QUE...?

El picoteo es tu enemigo a batir si quieres perder peso y no recuperarlo después. Tranquila, con los 10 menús diarios diseñados por la Dra. Beltrán y que tienes en esta galería de imágenes podrás adelgazar sin pasar hambre y, lo que es mejor, esa sensación de ganas de comer continua desaparecerá. Esta dieta está especialmente diseñada para que recuperes los buenos hábitos y el control sobre la comida.

Los garbanzos, como la carne, los huevos y el pescado, pertenecen a la categoría de los alimentos proteínicos, con la ventaja de que están casi libres de grasas. Además contienen en torno a 15 g de fibra por cada 100 g en seco, por lo que evitan el estreñimiento y favorecen la salud de la flora intestinal, importante para evitar la obesidad y para aumentar las defensas.

NO OLVIDES COMPARTIR💟🙌

By Curiosos a Dieta.       Sigue Nuestra Pagina y entérate de mas sobre como bajar de peso.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario